Bowling for Columbine

¿Por qué en Estados Unidos mueren 11.000 personas al año por armas de fuego?

Esta es la pregunta de la cual parte Michael Moore para desarrollar un documental, ganador de un Oscar en 2002, sobre la violencia y la cultura estadounidense unida a las armas. 

20 de Abril del año 1999, el presidente Bill Clinton anuncia el bombardeo de Kosovo, que tuvo como resultado un elevadísimo número de civiles muertos, al ser objetivos de ello un colegio de primaria y un hospital. Tres horas más tarde 13 personas mueren en el instituto de Columbine en Littleton, Colorado, a manos de dos adolescentes que también se quitaron la vida. 

Por desgracia, no fue la primera ni la última vez que sucede algo similar en los Estados Unidos. Y Michael Moore se pregunta el por qué de este fenómeno que afecta a este país, dejando un total de 11.000 muertos por armas de fuego al año, en distintas circustancias.

Moore creció en Michigan, y desde muy pequeño estuvo rodeado de armas, al igual que la mayoría de los estadounidenses. Queda claro entonces, que uno de los motivos de esta tendencia a utilizar armas de fuego surge de una educación y un entorno familiar que las ha normalizado. Incluso hay quien duerme con una semiautomática bajo la almohada, como Terry Nichols. A disposición de los adolescentes quedan libros como "El libro de cocina del anarquista" con el que fácilmente pueden preparar bombas y otros materiales para fabricar explosivos de forma casera.

¿Y la facilidad para adquirir armas?, también es otro argumento que justifica este comportamiento. En un banco cualquiera te dan gratis un arma con abrir una cuenta, sin apenas saber quién eres y qué puedes llegar a hacer, e incluso en una peluquería puedes conseguir toda la munición que necesites. Es más, todo el material utilizado en la masacre de Columbine fue adquirido de forma completamente legal, y las balas fueron  compradas en unos grandes almacenes, como si fueran un champú o unas galletas para el desayuno.

La milicia de Michigan, entrevistada en el documental, aparece como un grupo que defiende a sus compatriotas frente a las "amenazas" y apela a su responsabilidad como americanos. Y utilizan en su defensa una serie de argumentos que repetirán a lo largo del filme otros defensores de las armas: "Es una tradición, una responsabilidad...", "defender a los tuyos...", "obligación como americano...", "ayuda a la gente...".

En algunos Estados incluso se llega a plasmar en una ley la obligación de poseer un arma. La segunda enmienda de la constitución afirma el derecho de todos los americanos a poseer un arma, y a esto recurre Charlton Heston, protagonista de películas como Ben-Hur o Los diez mandamientos, para defender en Littleton, solo 10 días después del suceso, la posesión de armas. Y encabezando este congreso de la Sociedad Nacional del Rifle proclama: "Solo me lo arrebatareis muerto" y habla de estar "seguros en nuestra tierra de hombres libres, hogar de hombres valientes".

Sin embargo, algo falla cuando un niño puede emplear tan fácilmente un arma. En marzo del año 2000 un niño de 6 años mató en un colegio de Michigan a una compañera de su clase. Y de nuevo apareció en escena Charlton Heston para repetir su discurso.

Precisamente en Littleton se encuentra una de las mayores fábricas de armas de destrucción masiva del país: Lockheed Martin, donde están empleados miles de miembros de las familias de la zona. ¿Qué diferencia hay entre las masacres provocada por esas armas y la masacre de Columbine? En realidad ninguna. El relaciones públicas de la empresa enmudece ante esta pregunta, y finalmente recurre de nuevo a la defensa de EEUU ante las "amenazas".

Pero, ¿de qué amenazas hablamos? Si todas ellas fueran exteriores, ¿por qué hay personas con un arma en la mesilla de noche?

La respuesta es que los estadounidenses viven inmersos en una cultura del miedo, provocada por la situación de alerta permanente generada por los medios de comunicación. Que envuelven a la población en un círculo vicioso de miedo y consumo.

En comparación con otros países, el número de muertes por disparos en EEUU es algo espectacular. Muchos argumentan que se debe a la historia violenta del país, pero y qué hay del pasado de países como Alemania o Japón. También podría hablarse de una inestabilidad supuestamente causada por la diversidad étnica, o por la falta de control de armas, sin embargo, en su país vecino Canadá, la diversidad es equiparable y la posesión de armas es similar, y aún así las puertas de las casas están abiertas a cualquier hora del día y la cifra de muertos no tiene punto de comparación. 

Podría hablarse de una juventud violenta y alienada, y de la influencia de los espectáculos mediáticos violentos, los videojuegos, las drogas, determinados tipos de música, etc. Pero estos aspectos son comunes a todos los países con los que se compara Estados Unidos, y hoy en día con más razón por la llamada globalización.


Marylin Manson, famoso por sus canciones y su estilo provocativo, fue acusado como uno de los causantes de esta tragedia, y sin embargo nadie habla del presidente Clinton que esa misma mañana ordenó bombardear Kosovo. ¿Quién es más influyente: Marilyn Manson o el presidente de los Estados Unidos?

En el documental aparecen otras muchas entrevistas y vídeos como el de South Park o el de las guerras  en las que EEUU participó en otros países con sus resultados, al son de What a wonderful world. Aunque sin duda el momento más escalofriante lo ocupan las imágenes de la propia masacre, una auténtica pesadilla hecha realidad.

La conclusión es que los estadounidenses viven inmersos en una cultura de miedo que no se soluciona con tener armas al alcance de cualquiera, con el riesgo de que efectivamente cualquiera las use contra cualquier otro, en cualquier contexto.

En relación con lo comentado en clase tras la proyección, la educación para la comunicación (en referencia al carácter comunicativo del documental que invita a la reflexión) debe servir para reforzar un sentido profundo de la democracia y los derechos humanos. Se deben promover planteamientos éticos pero también tener un sentido amplio de la política y la historia de cada lugar.

Por último, y citando a uno de los autores estudiados, Umberto Eco: "La civilización democrática se salvará únicamente si hace de la imagen una provocación a la reflexión crítica, no una invitación a la hipnosis".

What a wonderful world (fragmento del documental)